La alquimia del sudor y el secreto de la alegría
La alquimia del sudor y el secreto de la alegría Por Fabián Núñez Baquero Este es el Taller Rapsodas Tres Mil. Su carné de identidad es el trabajo y la creatividad. Si la poesía es invención, entonces nosotros somos inventores. Pero como la invención es infinita, también nosotros somos infinitos. Somos infinitos de la única manera que podemos serlo: escribiendo poemas finitos que acotan al infinito. Por eso en nuestra infinitud respetamos lo finito, las pequeñas cosas, los hombres sencillos, las palabras limpias, torcidas de significaciones en espiral, pero rectas en su vuelo y en su alta aspiración. No comerciamos con ellas, porque el arte más excelso, la poesía, no es género de mercachifles ni oficio de agio ni ocupación de ganapanes. Tenemos secretos de alquimistas aunque sus resultados los damos a conocer sin euforia extrema pero sin menor alegría. Estamos contentos con jugar con el excelso naipe de las palabras, con reglas de juego de corazones, con la sonrisa a flor de piel y...